“A esto Jesús respondió:
—Yo soy el que da la vida y el que hace que los muertos vuelvan a vivir. Quien pone su confianza en mí, aunque muera, vivirá. 26 Los que todavía viven y confían en mí, nunca morirán para siempre. ¿Puedes creer esto?” Juan 11:25-26.
Me llama mucho la atención cómo inicia este versículo, con las palabras “YO SOY”, frase utilizada varias veces en la biblia que hace referencia a la divinidad de Dios. Porque, ¿acaso habrá alguien más que pueda dar vida donde hay muerte? ¿Hay alguien más que pueda hacer este milagro? No lo creo.
En la biblia encontramos que Jesús resucita a 3 personas y Lázaro fue una de ellas. Debemos saber que la resurrección nos habla de establecer el dominio de Dios en la tierra y devolver vida a un cuerpo que la había perdido. Recordemos que el enemigo vino para robar, matar y destruir; entonces, no es de extrañarse que el enemigo quiera traer muerte a nuestra vida, relaciones, sueños, metas, finanzas y salud. Marta y María le anuncian a Jesús, que Lázaro se encontraba enfermo, acudieron a Él no solo porque amaba a Lázaro, sino porque creían en su poder, confiaban en que Jesús podía sanarlo.
Sin embargo, al recibir la noticia, respondió que su enfermedad no es para muerte, sino para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella (Juan 11:4). Jesús se presenta cuando Lázaro ya tenía 4 días de haber muerto, su cuerpo ya tenía mal olor. Muchos consolaban a Marta y María por la muerte de su hermano, pero Jesús sabía que ese era el momento perfecto para un milagro aún mayor.
Nuestros sueños, metas, deseos, planes, economías o cuerpo físico pueden tener un padecimiento: estar secos, sin vida y sin fruto. Sin embargo, para Dios es el momento perfecto para resucitarlo, hacer cosas nuevas y que podamos ver una nueva cosecha en nuestras vidas; pero sobre todo, para que nuestras vidas glorifiquen el nombre de Dios.
Desde la creación, la razón principal de nuestra existencia es glorificar a Dios. Así que, si te encuentras como Marta y María, a la espera de que Jesús llegue y resucite un área de tu vida, es porque viene el momento de que seas un testimonio del poder de Dios. Mantén tu corazón con fe y agradecimiento a aquel que te ama como amaba a Lázaro, y que cuando supo de su muerte, lloró.
Lilian de Morales
septiembre 30, 2020Amén 🙏🙏 en Ezequiel Dios da palabra de vida, ven de los 4 vientos y da vida a esos huesos secos. Hoy todos tenemos algo en nosotros que necesita vida ❤ creemos que lo recibimos, gracias Andreita, te bendecimos 😘
Maury Arrecis
septiembre 30, 2020Vivamos con la esperanza que al morir, solamente nuestro cuerpo fisico dejara de existir en este lado del sol, pero que nuestro espiritu sera resucitado para reinar al lado de Dios , al otro lado del sol